dilluns, 27 de gener del 2014

Twitter, creando mi red de aprendizaje

Aún recuerdo el fin de semana en que creé mi cuenta de Twitter. Fue durante la famosa huelga de controladores en el puente de la Constitución de 2010. Íbamos de viaje a Venecia los cuatro de casa y partíamos en sábado. Seguíamos las noticias y en ellas informaban que AENA actualizaba la situación al momento desde su cuenta de Twitter. Ni corto ni perezoso me creé una cuenta, pero después de pelarme con dicha red durante un par de horas no hubo manera de conectar con la cuenta de AENA. Intentaba aplicar los mismo criterios de comunicación que usaba con el correo electrónico y  no entendía el funcionamiento de aquella red. Días después, con más tranquilidad y con ayuda de una compañera del instituto, fui entendiendo su funcionamiento. Con el tiempo he podido comprobar su utilidad a la hora de recibir y compartir información. Ahora mismo es mi red social de referencia en ese aspecto y una pieza principal de mi PLE.
Lo que no había hecho nunca era analizar estadísticamente las cuentas de mis seguidores o las que yo sigo. El uso de herramientas como Twitonomy, Followrwonk o Twtrland me ha servido para comprobar el potencial de ese análisis. No creo que cuando decida seguir a alguien acabe usando dichas herramientas, pero sí que le veo una gran utilidad a nivel educativo en el caso de mi materia. En matemáticas puede servir para hacer un mini proyecto con mis alumnos, relacionado con la estadística.
Aquí os dejo la presentación de la cuenta que he analizado. Es de @soniaser, una compañera del instituto a quien respeto y admiro mucho por su capacidad de trabajo, por su compromiso con el centro y por ser de las primeras profesoras en haber aplicado un cambio metodológico, utilizando las TIC, con su alumnado.



Por cierto, tuvimos suerte y pudimos ir de viaje a Venecia.

diumenge, 19 de gener del 2014

Mi diagrama PLE

Crear, aprender, comunicar, compartir, interactuar, gestionar, organizar ... ¡Que complicado! ¡Con lo fácil que es llegar a clase, abrir el libro por los ejercicios que había de deberes y corregirlos (mejor yo y no los alumnos ya que sino después pierdo tiempo y no acabamos el temario)! Luego explicar durante no más de quince minutos conceptos y procedimientos que el 50% del alumnado no va a seguir desde el principio y el resto cuando ya estén cansados de escucharme. Y, finalmente, poner ejercicios prácticos muy similares a los ejemplos hechos en la pizarra y, sobre todo, no poner problemas, no sea que tengan que pensar y razonar cómo aplicar esos procedimientos que no logro que aprendan. Además, mejor tenerlos distribuidos en clase de forma individual o como máximo formando parejas para que trabajen en silencio. Y yo, como soy un súper héroe, podré atenderlos a todos durante los últimos minutos de clase. No entiendo por qué no aprueban los dos exámenes que hacen a lo largo del trimestre.

La verdad es que cuesta mucho salir del sistema. Son muchos años de tradición que han pasado de generación en generación y que, actualmente, intentamos romper introduciendo un cambio metodológico en el aula.  Para ese cambio es necesario que vayamos creando nuestro propio entorno personal de aprendizaje y también que nuestros alumnos vayan creando el suyo con nuestra ayuda.